16 de julio de 2011
Álvaro Rodríguez protagoniza 'Todos Tus Muertos'
Protagonizada por Álvaro Rodríguez, el mismo de 'La gente de la Universal' y de 'Perro come perro', la cinta se la juega valientemente por una narrativa no tradicional, en la que los símbolos, los silencios y las relaciones entre imágenes a partir del montaje son protagonistas de la historia.
Salvador García, un humilde campesino cuya vida se trastorna al hallar cadáveres en su maizal.
El veterano actor Álvaro Rodríguez pasó la peor pena de su vida en enero pasado, durante la premiación del Festival de Cine de Sundance. La película que protagoniza, Todos Tus Muertos, participaba en la selección oficial; pero su productor, Diego Ramírez, y su director, Carlos Moreno, habían viajado a Holanda para cumplir con otro compromiso, así que estaba solo en Park City, Utah."Yo no sé inglés, así que me di cuenta de que nos habíamos ganado un premio cuando vi mi foto en la pantalla y los mexicanos saltaron para abrazarme", recuerda Rodríguez, que tuvo que improvisar un discurso de agradecimiento -en español- al momento de recoger el galardón a mejor fotografía (para Diego Jiménez).
Todos tus muertos, que se estrena hoy en el país, es su cuarta colaboración con el director caleño Carlos Moreno, con quien trabajó en Perro Come Perro y en dos episodios de Tiempo Final.
"Carlos la tiene clara, pero escucha mucho. Además tiene la capacidad de transmitir, algo que muchos no pueden hacer", cuenta el actor, nacido en Sevilla (Valle) hace 63 años y que tiene una carrera de 30 como actor del Teatro La Candelaria.
En el filme le da vida a Salvador García, un humilde cortero que, la mañana del domingo de elecciones en su pueblo, descubre una pila de cadáveres en un maizal. La historia es una mezcla de humor negro, absurdo y drama.
"Nosotros nos fuimos a vivir a una finca en Andalucía (Valle) un mes antes de empezar el rodaje. Y fue lo mejor, porque pude convivir con los campesinos de la región, aprender de ellos el oficio y su forma de vida", dice el actor, cuyo rostro es uno de los más conocidos de la TV (El cartel de los sapos) y el cine nacional (La gente de la Universal).
A pesar de su vasta experiencia, Rodríguez confiesa que hacer el papel de Todos Tus Muertos le representó un reto. "Yo tengo formación teatral, con mucho movimiento corporal, así que esta vez tuve problemas con la cámara. Salvador es un hombre contenido, que se expresa a través de los ojos; de hecho, solo tengo unos ocho parlamentos en toda la película. Eso fue muy difícil porque esos silencios revelan más el interior del personaje".
Mientras estudia varios guiones, hace más cortos y graba capítulos para una nueva serie de RCN Televisión, Rodríguez piensa en el trasfondo de la cinta, que estará en el Festival de Los Ángeles.
"Lo que más me asombra de la historia es la indolencia de la gente. Nadie piensa que detrás de cada muerto hay una familia sufriendo", dice.
Algunos trabajos de Álvaro Rodríguez: Suma más de cien cortos y está en tres proyectos teatrales. Algunas de sus cintas: 'La Gente de la Universal', 'Golpe de Estadio', 'Soñar no Cuesta Nada', 'Perro Come Perro' y 'En Coma'.
Dirección: Carlos Moreno.
Con: Álvaro Rodríguez, Jorge Herrera y Martha Márquez. Clasificación: 12 años.
Álvaro Rodríguez insiste en la necesidad de reflexionar acerca del conflicto colombiano a través de las manifestaciones artísticas.
¿Le gusta ser el protagonista? Mientras funcione, sí. Lo he disfrutado en cine y teatro. Nunca en televisión, porque como es para los bonitos, pues me llaman para hacer de “caspa” (risas).
Desde ‘Perro come perro’ viene trabajando en varios proyectos con Carlos Moreno, ¿qué tal funciona ese dúo? Perfecto, desde que nos conocimos nos conectamos muy bien. Carlos es una persona maravillosa, humilde y sobre todo lúcida frente a la búsqueda del lenguaje cinematográfico.
¿Qué aprendizaje le deja haber estado en ‘Todos tus muertos’? Esta es una película que deja claro que en Colombia es posible realizar cine de calidad con poco presupuesto, se utilizaron locaciones naturales, se aprovechó hasta el último rayo de la luz del día.
Lo más difícil de interpretar a Salvador. Este personaje me puso a estudiar, porque tiendo a ser muy expresivo. Él es muy sencillo, pero tiene una carga sentimental grande. Además es bizco, aunque a veces del susto se le enderezan los ojos.
¿Cómo recibió la noticia de la selección de la película para Sundance? Es un logro estar seleccionados entre las 14 de las 1.075 películas que fueron enviadas. Carlos Moreno va para arriba, pues vuelve al festival después de asistir en 2008 con Perro come perro.
¿Qué tan complicado es ponerle humor al conflicto colombiano? El humor es inherente a nuestra cultura y nos ayuda a revelar nuestras problemáticas, aquí se le mama gallo hasta a la muerte.
El conflicto armado es un tema recurrente en el cine colombiano. ¿Si fuera realizador seguiría esta línea? Hacer cine es hacer historia y éste debe dar cuenta de lo que somos. Mientras Colombia sea violenta, el arte en general hablará de ello.
Y cuando los espectadores dicen: ‘¿Otra vez una película de guerra?’... La gente se satura de ver su conflicto en ficción, pero no reacciona frente a las masacres que acontecen en el plano real, nadie protesta frente a lo que pasa en el país.
Y las narconovelas... Insisto en que es un tema del que debe hablarse porque responde a lo que somos, pero se está cayendo en el cliché del “traqueto”, en el narcotráfico hay muchas historias por contar.
En el 91 estuvo con ‘La gente de la Universal’, ahora llega ‘Todos tus muertos’. ¿Cómo ha visto la transición del cine colombiano en esta década? La evolución es enorme. Lo más grato es ver que son los jóvenes los que proponen otras estéticas, alejadas de los esquemas tradicionales impuestos por los gringos.
¿Se queda con el cine, la televisión o el teatro? El cine y el teatro, pues requieren una mayor exigencia estética y se convierten en un canal para representar nuestra historia, mientras que la televisión por su visión comercial se vuelve más superficial.
¿Qué proyectos vienen en teatro? Con mi grupo Alcarabán comenzaremos a experimentar y fusionar el teatro y el cine, tomarnos las calles, su gente, improvisar con la cámara y arriesgarnos a crear sin temor a equivocarnos.
¿Qué le falta al teatro colombiano? Presupuesto y apoyo a los jóvenes que se la están jugando por crear desde los grupos en los barrios. Los medios se concentran en impulsar sólo las obras de los teatros grandes y comerciales y dejan a un lado un movimiento callejero de mucha calidad.
¿Qué personaje volvería a encarnar? Ninguno. Hay muchos que quiero, pero prefiero crear que repetir.
¿Un lugar para descansar? El mar, me encanta el agua y es un lugar en el que han llegado a mí algunas musas.
A usted le gusta la rumba, ¿qué música prefiere para bailar? La salsa y el reggae.
¿Cómo le va con el baile? Me encanta, y bailo de todo con los cuatro pasitos que tengo.
¿De niño qué quería ser? Voceador de prensa: “Léeease El Espeectador hoooy”.
¿Cómo ve al presidente Santos? No creo en ninguno de ellos. Creo en la política, pero no en los políticos colombianos.
¿Interpretaría a algún líder político? De pronto a un Hitler bien chibcha.
Entrevista Elespectador.com

