25 de marzo de 2010
Matrimonio gay en Sevilla
A mí no me sorprende que dos hombres se amen, o que dos mujeres se desnuden en la intimidad de su alcoba y exploren los terrenos de la sexualidad, para proporcionarse placer.
Amar y ser amado, es una historia tan antigua como la humanidad misma. En los orígenes de la cristiandad, Jesús de Galilea, vivía rodeado de homosexuales y lesbianas; Moisés y Miriam, en el Éxodo; estaban acompañados de este género y la Biblia no puede desconocer, porque escrito está," que el apóstol Pedro amaba al capitán Cornelio y el apóstol Felipe, jamás ocultó su pasión por un eunuco etíope.
Ruth amó a Noemí y me remito al texto bíblico para que no crea que le estoy mamando gallo. En el libro de Ruth, versículo 1 capítulo 16, dice: " No me pidas que te deje y que me separe de ti; iré a donde tu vayas y viviré donde tu vivas”.
El amor entre Gay no es nada nuevo, porque el rey David y Jonatán fueron amantes, compartieron sus cuerpos en la intimidad y por su desnudez, sus caricias y sus besos no se decretó un segundo diluvio universal. En la historia de Sodoma y Gomorra, los soldados no buscaban divas de sesenta, noventa, sesenta para desflorar después del himeneo, buscaban muchachos impúberes, para meterlos en el camino del sexo.
El emperador Adriano, no podía dormir en paz si a su lado no estaba desnudo Antinoo su mocito; el niño que le calmaba su sed dándole de beber en el cántaro de su mano y que el rey de Roma inmortalizó fundando una ciudad en su nombre.
No me escandalizan los gay, porque Arthur Rimbaud amó muchos hombres y su poesía sigue viva. No voy a dejar al poeta Whitman, ni voy a maldecir " Hojas de Hierba”, porque el bardo amaba a los efebos.
Wilde para mí siempre será grande, genio y me importa un bledo las picardías clandestinas que pudo haber hecho con Bossie, el niño mimado inglés que le hizo perder la cabeza, la familia y la fama. Jamás me apartaré de Sócrates, porque es mi maestro de cabecera y si él con pasión desenfrenada se durmió a Anito, Leycón y Melitón eso me tiene sin cuidado; me interesa su sabiduría.
Finalmente, no voy a cometer la irreverencia de ponerme a inventariar los muchachos que a la cama han llevado o llevaron en otras épocas García Lorca, Mallarmé, Barba Jacob, o Fernando Vallejo, cada uno es libre de elegir si nació para empujar o para que se lo empujen y en esa trivialidad no me voy a detener.
Me metí en todo este cuento de alcobas, intimidades, secretos y caricias de los santos y los genios, para llegar a Sevilla, Valle, ciudad monástica, clerical y rezandera, donde se arma un escándalo por todo. Por estos días se ha vuelto noticia, el matrimonio de Rafael Duque Naranjo con Arcesio Antonio Bedoya Bedoya, su pariente cerca.
Está de moda destapar la sexualidad y a esta confesión llegó el rudo Marlon Brando, Burt Lancaster, James Dean, Cary Grant, Richard Chamberlain, Richard Gere, Kevin Spacy y otros consentidos de la meca del cine. El turno ahora, le corresponde a nuestro dilecto amigo DUQUE NARANJO, que aparece casado con varón, según lo confirma la nota marginal que existe en su partida de bautismo registrada en el libro 21, folio 256, ord 767 y respaldado por la firma de Monseñor Julián Mendoza Guerrero, Obispo de Buga, matrimonio que según la prueba testimonial, se realizó en la década de los años setenta.
El universo de Rafael siempre han sido los libros, es un escritor de fina prosa, un buen parlero y admirador de las divas, " Pero como debajo de cada piedra se esconde un secreto”, Duque Naranjo, sí nos tiene que contar qué fue lo que realmente sucedió hace 25 años y quién desfloró a quién.
Nota del editor:
Próxima mente, nuestro amigo y columnista Rafael Duque Naranjo, dará respuesta a este escrito y nos contara la verdad de lo sucedido.
Autor Javier Marulanda