28 de noviembre de 2010
'El idioma es el activo más valioso que tenemos': Antonio Arias
Antonio José Arias Betancourt
En EL TIEMPO corrige los errores ortográficos sobre el papel y aconseja a los redactores.
Diagnóstico de Antonio J. Arias, autor de libros sobre lenguaje y corrector de estilo de EL TIEMPO.
Nuestro idioma, cada día, va de mal en peor, porque las personas están creando sus propios términos y confiando demasiado en el corrector ortográfico de los computadores y no en un buen diccionario o una buena gramática.
Eso cree Antonio J. Arias B., lingüista y periodista, autor del manual 'Hablemos bien' y de la tira cómica y didáctica 'Pili, la detective del idioma'.
Arias es conocedor de lenguas antiguas y modernas e investigador de la lingüística aplicada, esfuerzo que le ha valido ser una autoridad en el "control de calidad lingüística" en los medios de comunicación, especialmente en prensa y radio.
"La ortografía se está perdiendo en las cibercharlas, porque hay usuarios que escriben con unas abreviaturas que no las entienden sino ellos mismos -dice-. Si cada uno de nosotros crea términos, si cada uno de nosotros defiende sus propios argumentos lingüísticos está, simplemente, incomunicando".
Hacer comunes las normas que rigen el lenguaje hablado y escrito, con el fin de prevenir los errores, es el remedio que aconseja este defensor del idioma.
Arias apela a la interiorización de las normas ortográficas, pero también a la memoria visual, porque considera que es un buen criterio cuando se es un lector asiduo.
En cambio, no aconseja el corrector ortográfico del computador:
"Es un adminículo en el que no se puede confiar, porque él no distingue entre las diferentes funciones de los términos lingüísticos y, muchísimas veces, señala errores donde no los hay", afirma.
Para este experto, participar en el Concurso de Ortografía es importante para las instituciones educativas, porque les permite medir el nivel en el cual los estudiantes están asimilando la instrucción que reciben.
De igual forma, es beneficioso para los alumnos, porque escribir y hablar bien les da muchas ventajas, ya que la comunicación determina la calidad de las relaciones sociales y el acceso a oportunidades académicas y laborales.
Por este motivo, Arias concluye que "el idioma es el activo más valioso de todo ser humano y, por ello, hay que respetarlo".
La Dirección de Responsabilidad Social de la Casa Editorial EL TIEMPO apoya esas premisas, y se preocupa por el buen uso y la correcta escritura de nuestro idioma. Esa iniciativa se ha impulsado a través del CONCURSO DE ORTOGRAFÍA, que este año cumplió su XV edición, y ha llegado a más de diecinueve ciudades de todo el país. De esta manera se fortalece su compromiso con la educación.
Hablemos correctamente: en la cotidianidad no se usa bien el verbo haber
En construcciones como: Habían veinte personas en la fiesta, Hubieron deslizamientos, tenemos un tiempo simple del verbo haber y está siendo usado anormalmente, puesto que es impersonal y sólo se utiliza en las terceras personas del singular, para expresar la presencia del ser o seres, objeto u objetos designados por el sustantivo que, en el enunciado se sitúa, normalmente, después del verbo.
El autor de este texto recibe comentarios a sus columnas en hablemosbien@hotmail.com