24 de septiembre de 2014

Venus, la Tierra y el efecto invernadero

  • 24 de septiembre de 2014
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  • Venus, la Tierra y el efecto invernadero. O también: el infierno, el paraíso y el calentamiento global.
           
    “Efecto invernadero”. Término acuñado desde finales del siglo XIX por el científico sueco Svante Arrhenius, cuando señaló que los combustibles fósiles podrían dar lugar o acelerar el calentamiento de la Tierra, alterando el -efecto invernadero natural en el que la capacidad de absorción de la radiación infrarroja por parte del vapor de agua y el dióxido de carbono, presentes en nuestra atmósfera, permitían mantener una temperatura media superficial de 15º C. El científico predijo también que una concentración doble de dióxido de carbono provocaría un aumento de temperatura de 5ºC.

    El planeta Venus, caracterizado por esa intensa luz de estrella, que muchos denominan lucero vespertino, brilla como una guirnalda, haciéndonos compañía en las noches sin nubes, cuando miramos hacia la bóveda celeste buscando las estrellas, que instaladas al alcance de nuestros ojos, nos recuerdan el milagro de la vida. Pero luego descubrimos que el brillo de Venus obedece al reflejo del sol, cuando este se mira en los envolventes espejos de nubes sulfurosas, que como tenazas se aferran al planeta, creando una atmósfera dentro de la cual se encuentra el infierno, como quedó demostrado cuando los rusos hicieron descender, a través de las densas nubes de dióxido de azufre y monóxido de carbono que envuelven su atmósfera, la sonda´ Venera´ hasta la superficie del mismo. La nave había sido diseñada  como un batiscafo, previendo las condiciones hostiles que los análisis de espectrografía entregaban a los astrónomos en sus bases.  En dos escasas horas esta fue destrozada por la presión atmosférica de Venus, equivalente  a 90 atmósferas terrestres, es decir, la que se sentiría a mil metros de profundidad en el mar. Agregando a esto los casi 500ºC de temperatura constante, que los vientos hacen rotar  sobre la superficie como un turbión destinado a derretir cualquier material diferente al del basalto vitrificado que alguna vez corrió como un  río de lava por los gigantescos canales  que componen este dantesco paisaje. En estas agónicas dos horas, ´ Venera` envió esa invaluable información, que fue la primera obtenida en sitio; y nosotros evidenciamos el resultado del efecto invernadero que alguna vez tuvo inicio en el planeta vecino. 

    Venus, como todos los planetas del sistema solar se formó por agregación constante de materiales provenientes de la inmensa nube de polvo estelar que hace cinco mil millones de años se concentró en un extremo de la Vía Láctea, dando lugar a los planetesimales (incipientes formaciones planetarias que crecieron  hasta convertirse en los planetas que hoy conocemos).

     Varias características hacen único al planeta Venus en el Sistema Solar: presenta el más extremado efecto invernadero, y su rotación es diferente  en relación con los demás cuerpos de nuestro sistema, exceptuando, claro está  a Urano; ambos giran sobre sí mismos en un movimiento retrógrado, en el  sentido de las manecillas del reloj, de Este a Oeste, en lugar de Oeste a Este como el resto de los planetas de nuestro sistema.

    Todos sabemos que la existencia de la Tierra y de nosotros mismos es producto de un proceso de millones de años, donde ha estado presente el intercambio de material estelar, mediante  colisiones de los cuerpos celestes: cometas, asteroides, meteoritos, mensajeros permanentes de la dinámica interplanetaria; formando un entramado que los científicos tratan de descifrar.

    Estamos sometidos a  fuerzas descomunales que modelan la Tierra.
    Pero nuestro planeta, a pesar de su dinámica geológica, es habitable.

    Estamos a la distancia indicada del Sol, como para permitir la vida que hoy tenemos. La presencia de agua líquida es la precondición para que esta exista. Vida que encontramos desde el fondo del mar hasta los picos nevados de nuestras montañas, desde el trópico hasta los polos.

     Nuestra atmósfera es la defensa de la Tierra; ésta hace de escudo frente al constante bombardeo de meteoritos, que tras su entrada arden en contacto con ella, destruyendo parte de estos y restando volumen y velocidad a otros. El núcleo del planeta, mediante  flujos de calor genera los campos magnéticos  que  protegen de la  radiación que viene del Sol y de sitios más distantes del universo. La capa de Ozono absorbe gran parte de la radiación ultravioleta, etc. 

    Pero la Tierra está  saturada de gases invernadero por el uso indiscriminado de combustibles fósiles y por los Clorofluorocarburos (CFC). Los países altamente industrializados, compiten  por la producción en serie, emitiendo cantidades descomunales de dióxido de carbono. Las compañías que explotan los yacimientos y comercian con los combustibles, pagan a sus “científicos” para que hagan  amañados balances, mintiendo acerca de los niveles de impacto sobre un planeta que es de todos. Hace apenas unos años se produjo el derrame de crudo en una de las plataformas que la British Petroleum  Company tiene instaladas  en  el Golfo de México, creando la más catastrófica situación en el frágil ecosistema marino, y de paso, afectando a miles de pescadores artesanales que derivaban su sustento de estas aguas. Y para no ir muy lejos, el irreparable daño ambiental de la Chevron en Ecuador.

     Cuando los científicos envían máquinas no tripuladas a indagar por la naturaleza de planetas, lunas, cometas y asteroides; haciendo estudios exhaustivos acerca del origen, actividad pasada y actual, presencia de agua, etc. Uno se pregunta: ¿Buscan  acaso un planeta que podamos adecuar (como se pretende con Marte), para  desechar este cuando la saturación tóxica lo haga inhabitable? A diario encontramos especies desconocidas en todos los rincones de la Tierra. ¿Por qué nos empeñamos en  desconocer  las maravillas de nuestro planeta, cuando apenas empezamos  a saber de él?  Y la otra pregunta: ¿podremos salvar nuestro Paraíso Terrenal?
    Jacinto Lara
    Sevilla, septiembre 20  de 2014
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