9 de febrero de 2014
El monumento Alto de la Cruz
La cruz se construyó en el barrio El
Porvenir, por ser éste el más alto y más
apropiado para la construcción, ya que se ve desde el pueblo, desde Valle y
desde la montaña, es decir cubre todos
los ángulos.
En los años cincuenta ya había una cruz allí, no en cemento pero si en laurel, árbol
que es característico de Sevilla, no pidieron permiso para hacerla en la
primera ocasión ya que la mayoría eran propietarios del espacio que ocupaban.
La idea de construir el monumento fue de las profesora Teresa y Rosmira Ospina,
quienes eran vecinas de este lugar.
La Cruz, no se puede mover de allí, ya que pesa (100) toneladas. Cuando empezaron la
excavación para los cimientos de la Cruz,
encontraron una osamenta al parecer
canina. Su propósito era otro, siguieron la excavación que fue de 6x6 metros de diámetro.
Un hecho que marco a los habitantes del
barrio El Porvenir y El Alto de la Cruz, fue cuando el concejo municipal decidió
que esta sería la nueva zona de tolerancia, así que se tuvieron que acomodar a la nueva ley y vivir en paz
con los burdeles, que aun siguen existiendo en ese barrio.
Los fondos para financiar los materiales, refrigerios y mano de obra,
fueron con la colaboración de todo el pueblo. Para recoger los fondos para la
construcción del monumento Alto de La
Cruz se realizaron festivales de música
campesina, se vendieron empanadas y gallardetes, hubo presentaciones de artistas
sevillanos en el Teatro Real y un
reinado infantil. Las actividades se
llevaban a cabo cada 15 días, así que esto hizo que se prolongara la
construcción del Alto de La Cruz por
cuatro meses más, hasta tener los fondos necesarios para empezar la obra, la
persona que dio mayor presupuesto fue el maestro Corrales.
La cruz tiene de base 6x6 metros de diámetro, por dos metros de profundidad. El cimiento se
llevo diez volquetadas de piedra, balastro, arena, hierro, y alambre. Cuenta con un peso aproximado de cuarenta 40 toneladas, es mucho
más fuerte la parte vertical que la horizontal. Para el andamiaje, que quedo de 19 metros de altura y 9 metros de
brazos, con diámetro de 60x90, se
emplearon 60 guaduas de todo su largo,
62 tablas de piso, 32 listones, 30 kilos de alambre, 25 libras de puntilla, 3
volquetadas de balastro, 110 kilos de hierro de pulgada y los flejes de tres
octavos, además 114 sacos de cemento.
La mano de obra no fue difícil ya que había
demasiada colaboración de parte del pueblo. Siempre en la construcción había
más de 30 personas, todo lo hicieron a
mano ya que no habían maquinas que los
ayudaran. Los lazos y las vasijas las
prestaba la Estación de Bomberos y los
vecinos. Las escaleras las hicieron con guaduas
enteras, tenían instalados altavoces y cuando necesitaban algo lo pedían
por este medio.
La persona responsable para recoger los
fondos para pintar la cruz, fue la señora Julia Orjuela, quien hizo una rifa de un cuadro de la Virgen
del Carmen, que había sido donado. En ese tiempo un almacén de fotografía vendió toda la boletería, pero el ganador
nunca reclamo su premio, así que se dono en beneficio del monumento.
La inauguración se llevo a cabo el día 3 de
mayo de 1961 con una misa campal, a la cual acudió mucha gente, el padre Parra fue el que celebro la misa y
declaro inaugurado y bendito el monumento del Alto de la Cruz.
La junta directiva o junta cívica en pro a la
construcción del monumento Alto de la Cruz:
Héctor Antonio
Londoño=Vice-Presidente
Bernardo Gómez=Tesorero
Rosmira
Ospina=Fiscal
Ezequiel
Osorio=Secretario
Por: María Alejandra Molina Franco
Fotos: Redes Sociales
Fuente: Centro Municipal de Memoria de Sevilla